DIARIO 2009


El primer día que sentí que algo no andaba bien, que simplemente no encajaba, fue cuando vino a mi esa sensación de estar frente a personas desconocidas, aún cuando llevábamos dos años de vernos todos los días, le conté, les dije que sentía que hoy era el primer día que nos conocíamos, me presente les dije que mi nombre era Erika, sus rostros se cruzaron en sinónimo de desconcierto, por un segundo pensé en actuar decirles que mentía, que era en broma, pero la incertidumbre me callaba, continué comiedo de una pizza, bebí un sorbo de aquel jugo, y mientras tanto sus voces se distanciaban aún más de mis recuerdos, se reían me llamaron tonta y loca. Y aún así la duda pesaba en mi, y se reflejaba sobre estos clones de amigos pasados, entramos a clase y yo evadía sus miradas, disimulaba intercambiando sonrisas, debía ser buena, olvidar que de repente me sentía transportada a una realidad que no me pertenecía.